CÓMO NOS AFECTA EL OTOÑO Y CÓMO NOS PUEDE AYUDAR EL MÉTODO YUEN



A continuación vamos a ver qué nos sucede en otoño. Podríamos decir que lo veremos en la forma complicada, tal y como se nos muestra por todo lo que implica, por lo que sucede en este tiempo.

HAY OTRA MANERA SENCILLA Y SOBRE TODO EFECTIVA DE ATRAVESAR ESTA ESTACIÓN.

¿CÓMO?

Borrando los efectos de todo lo negativo que nos ha sucedido a nosotros, no sólo a lo largo del año, sino de muchos años y muchas existencias nuestras, de nuestro entorno, de la sociedad, del planeta y que se extiende y nos afecta más allá de lo imaginable.

Borrando las memorias que todo ello ha dejado en nuestro cuerpo, mente y espíritu. Logrando el equilibrio y neutralidad entre ellos. Todos deben estar fuertes, pero esta fortaleza tiene que guardar equilibrio, es decir, ninguno debe ser más fuerte que el otro. Deben actuar conjuntamente, pero también por separado, en igualdad de fuerza cada uno.

ESTO NO ES ILUSIÓN, ES REALIDAD.

Esta realidad resulta demostrada no sólo cuando, después de las correcciones que se hacen con el método, las personas se encuentran más vacías de aquello que las aprisionaba, más distendidas o felices, sino cuando los cuerpos van recuperando su estado natural de salud, su estado de homeóstasis, cuando van desapareciendo los dolores, limitaciones…, en definitiva, cuando las personas experimentan que pueden volver a hacer su vida normal y de una manera natural, cuando ven que ya no necesitan estar supeditados a más fármacos.

No obstante, para todas aquellas personas para las que no sea el momento, por el motivo que sea, de acudir al Método Yuen, si creo interesante hablar de cómo y de qué manera nos podemos sentir más alterados en este tiempo de otoño.

EL OTOÑO ES LA CAJA DE PANDORA DE TODAS NUESTRAS REALIDADES. EL OTOÑO NO PERDONA.

Es un tiempo de revisión de todo lo positivo y negativo que hemos hecho, ordenadamente, en el invierno, primavera, verano, el largo verano y el propio otoño. Recoge la información de todas las estaciones, por eso, y por ser la única estación que exige resultados, es la más compleja.

Nos coloca ante las siguientes preguntas:

•¿QUÉ ES LO QUE HAS HECHO?
• ¿PARA QUÉ LO HAS HECHO?
• ¿QUÉ QUIERES HACER?

NO IMPORTA EL POR QUÉ

En otoño el ser humano, al igual que los árboles, debe limpiarse de recuerdos negativos, quedarse esperanzado.

No sólo nos afecta nuestro recorrido personal a lo largo del año, sino también lo que ha pasado en el mundo y a la sociedad.

NUESTRO CUERPO, MENTE Y ESPÍRITU DEBEN ESTAR FUERTES ANTE CUALQUIER EFECTO EXTERNO QUE PUEDA AFECTARNOS.
No sólo para las influencias que proceden del inconsciente colectivo, sino también para otros y poderosos desencadenantes emocionales:

• Los pensamientos
• Los pensamientos de otras personas
• Los pensamientos sobre lo que piensan otros acerca de nosotros
• Lo que creemos que otros piensan de nosotros

También nos afecta todo aquello que podemos ver, oler, tocar y sentir, escuchar o leer.

Es más corto el tiempo desde el fin de la jornada hasta la noche, por lo que hay la sensación de tener menos tiempo para vivir.


Es un tiempo de reflexión, sobre todo de resultados económicos. En los negocios se miran los resultados, se trata de ganar el tiempo que se ha “perdido” hasta septiembre.


La sensación es de menos tiempo para todo, aunque sea el mismo. La gente tiene sentimiento de pérdida –sólo tengo tres meses para hacer lo que no he hecho durante todo el año-.

Aparece una depresión post-vacacional, el ser humano empieza a sentir que no tiene vida.


La primavera le ha quitado 14 días al otoño, debido al cambio climático, por lo que es menor el tiempo para limpiar.


EL PLANTEAMIENTO MÁS OPTIMÍSTA QUE PODEMOS HACER ES QUE EN TRES MESES LIMPIAMOS Y EN EL RESTO DEL AÑO RECOGEMOS. ASÍ NOS SERÁ MÁS FÁCIL.

Si hay más días de primavera, hay más días de viento, el otoño se vuelve extremadamente seco con menos agua en invierno. Es decir, a mayor viento, mayor sequedad.

Si la naturaleza está siendo golpeada, también lo está siendo el ser humano, ya que el viento provoca la locura en el ser humano, aumenta su estado de “acritud”, está más angustiado y crece la bipolaridad.

En primavera está la intención de crecimiento, tenemos ganas de hacer cosas.

“EL OTOÑO ES TIEMPO DE PERDONAR Y RECONSIDERAR”

En esta estación no podemos soportar que se nos eche en cara las cosas. El otoño es un “ser espoleado”.

Es la única que lo tiene todo, viento, calor, humedad, agua. ¿Para qué? Porque necesita limpiar todo. Se trata de una revisión útil.

EL OTOÑO ES NOSTÁLGICO por excelencia, aparece la tristeza (falta de cosas), la búsqueda de plenitud. Empieza la pérdida de luz y el ser humano necesita encontrar su luz personal. El diálogo con la naturaleza siempre ha de ser positivo (qué buen día hace,…).

Nos prepara para llegar a la oscuridad, para los cambios de luz. Nos enseña a pasar de la gran luz del verano a la gran oscuridad del invierno.

La connotación más hermosa del otoño es que los días se acortan y las noches se alargan, lo que implica más tiempo en casa. Es en la casa donde el hombre tiene que recuperarse y no en otro lugar.

Es la última recolección de los frutos del verano.
El suelo se recubre de hojas, empieza la descomposición de las plantas, que son “abono de la vida” para la primavera. Se hace necesario reposar las cosas que ya no son necesarias, para que en la primavera rebroten.

La temperatura empieza a bajar y la escarcha indica el frío de la noche. Si baja la temperatura aparece más hostilidad en el ser humano.

LA NATURALEZA NOS HACE SENTIR CARENCIAS. Los árboles cambian de color, faltan hojas y el frío se hace cortante.

SI APARECE UNA SITUACIÓN DE CRISIS, debemos ponernos en la situación de para qué necesito esa experiencia. No entrar en el por qué.
En esta época se hace una revisión del daño entre las parejas.

Aparecen rencores, pero no sólo entre las personas, sino también entre naciones, civilizaciones…

EN LA NATURALEZA SE PRODUCEN DESEQUILIBRIOS DE FLUIDOS.

Ya Hipócrates describe los fluidos más importantes:

• LA SANGRE, fuente de toda vitalidad
• LA CÓLERA o BILIS AMARILLA, jugo gástrico indispensable para la digestión
• LA FLEMA, secreciones incoloras, incluyendo sudor y lágrimas
• LA BILIS NEGRA o MELANCOLÍA, responsable de oscurecer otros fluidos y de que la sangre, la piel o las heces se volvieran nauseabundas.

Para Hipócrates, las enfermedades resultaban de un desequilibrio entre los cuatro humores.

Señalaba que la calidad de estos humores variaba también dependiendo de la época del año, de modo que hizo una correlación entre los distintos humores, los elementos universales y la estación del año en que predominaba cada uno.


AIRE - SANGRE - PRIMAVERA
FUEGO - BILIS AMARILLA - VERANO
TIERRA - BILIS NEGRA - OTOÑO
AGUA - FLEMA - INVIERNO

Volviendo a nuestro otoño, la bilis negra es una concentración de ira y rencor, que es necesario eliminar. Es una época de limpieza.

También es época de recordar la TIERRA, el lugar donde se ha nacido, con más orgullo que en otra estación.

APARECE LA MELANCOLÍA, la connotación más dura de este tiempo. Apetece ver a alguien o estar con alguna persona.

EL OTOÑO ES SEQUEDAD, TIERRA, METAL. El viento mueve la tierra, lo que implica un descenso en los aminoácidos. Se inicia un periodo de depuración en la tierra (hay que limpiarla).

EL OTOÑO ES EL TIEMPO DE MUERTE, en el sentido de dejar algo que no vale por algo que vale. Tenemos que dejar que las cosas que no sirven se marchen Es muy importante echar fuera lo que no valga.

ES TIEMPO DE REPOSICIÓN de células, piel, pelo…
ES TIEMPO DE FORTALEZA, nos enseña a perder y a saber que algo vamos a ganar, que volveremos a ganar. El movimiento del cielo fortalece y da resistencia. El otoño quita cosas “poco a poco”, lo que da resistencia.

APRENDER A PERDER PARA ENCONTRAR
ES MOMENTO DE INTROSPECCIÓN, nos permite interiorizar, entrar dentro aprendiendo nuevamente.

En otoño se entra en un momento muy especial. Aparecen las sensaciones de “¿y l@ volveré a ver?” o “¿será igual?”, lo que implica una sensación de triste DEJAR, pero también vendrá la alegría de ENCONTRAR.

Punto Cardinal: OESTE
Clima: SECO (limpiar fluidos excesivos)
Horario: ATARDECER
Color: BLANCO (desapego, pureza)
Orificio: NARIZ
Tejido: PIEL, PELO
Manifestaciones externas: PELOS-VELLO
Sentido: OLFATO
Sabor: PICANTE
Indicador: SENSIBILIDAD / TRISTEZA
Órgano: PULMÓN YIN (purifica el aire y la sangre)
Víscera: INTESTINO GRUESO YAN (regula la pureza)
Manifestación: EFUSIÓN / LLANTO
Idea: LIBERTAD / DESAPEGO / PERDÓN
Emoción: PLENITUD
Acción: PURIFICAR Y LIMPIAR LO VIEJO

COACH. INSTRUCTORA OFICIAL MÉTODO YUEN.TERAPIA ESTRATÉGICA

2 comentarios:

  1. En el trabajo bien hecho siempre se obtiene el mismo resultado, La Maestría". Si además has cosechado buenos amigos y el amor habita en tu casa,tu otoño este año te regala felicidad y reconocimiento. Que Dios te bendiga.

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