Recién llegada de Gran Canaria, mis únicos sentimientos son de agradecimiento y de felicidad por el fantástico seminario impartido por el Dr. Yuen.

¿Qué diferencias he encontrado?

Es muy diferente estar en los seminarios, viendo cómo el Dr. Yuen trabaja y hace las correcciones, a comenzar tú mismo a hacer correcciones una vez que ha terminado el seminario. Y no es porque sea difícil trabajar el Método, ya que, precisamente su sencillez y simplicidad hace que a muchas personas este Método les resulte “una tomadura de pelo” y que les sea difícil de aceptar, si no fuera por sus resultados, sino fundamentalmente porque, para muchas personas, resulta complicado percibir su intuición y confiar en las informaciones que recibimos a través de ella para poder resolver los problemas de las personas que llegan hasta nosotros.

La certificación sólo acredita haber asistido a nueve cursos y tener, al menos, cien horas de correcciones, lo que no es lo mismo que haber alcanzado el conocimiento suficiente del Método para poder transmitirlo de manera eficaz y con el alcance y profundidad necesarios con que el Dr. Yuen quiere que se transmita su Método.

Esta observación es importante, porque si queremos que este Método sea conocido a nivel mundial, las personas que tenemos la gran suerte de ser la avanzadilla en él, debemos ser responsables y serios al cien por cien de lo que estamos transmitiendo y de la imágen que debemos dar en todo momento del Método Yuen.

Los que me conocéis sabéis lo importante que es para mí esta herramienta por todo lo que se produce y es por ello que, desde mi inicio en el Método Yuen, mi empeño ha sido la seriedad, por mi parte, en todo lo que se refiera a él.