Se ha sugerido que la mente humana tiene el poder y la capacidad de lograr todos nuestros sueños, de curar cualquier enfermedad, de invertir la pobreza y de apaciguar unas relaciones conflictivas.
Sin embargo, la mente no es más que uno de los numerosos programas “software” que determinan nuestras acciones y atracciones.

Todas las cosas negativas, desde los traumas, a las toxinas ambientales o el miedo, puede apagar los interruptores del delicado circuito que es el mecanismo de auto corrección de nuestro cuerpo.

Volviendo a conectar los interruptores se restaura la circulación normal de energía y con ello la salud y el bienestar.

El método se basa en encontrar una debilidad en la persona a nivel de cuerpo, mente y espíritu y trratamos con la energía que se manifiesta a nivel físico, que puede ser el resultado de cualquiera

de los otros niveles de conciencia:

Nivel físico

Nivel mental

Nivel emocional

Nivel psicológico

Nivel psíquico

Nivel espiritual

El programa apropiado de nuestra salud se logra detectando no una sino numerosas debilidades –cosas que se han apagado y volviéndolas a encender- .

El “bio-ordenador” de cada persona recuerda y registra cada experiencia que acontece en alguna ocasión, individual o colectivamente.